Top
TAKTICTAKTIC ¿Qué es Growth Hacking y cómo se aplica?

¿Qué es Growth Hacking y cómo se aplica?

El término Growth Hacking está cada vez más de moda en el ámbito del Marketing Digital. Su uso se ha extendido sobre todo en el mundo de las Startups, para las cuales se ha convertido en una necesidad. Pero ¿qué es Growth Hacking?

Qué es Growth Hacking

El Growth Hacking es una disciplina cuyo objetivo consiste en incrementar de manera rápida y notoria el volumen de usuarios, ingresos o impactos de una empresa, reduciendo al mínimo los gastos y esfuerzos. La premisa de esta disciplina es clave: hacer crecer la empresa. Por eso, cada estrategia, táctica e iniciativa llevada a cabo por quienes la lideran se dirige a tal fin.

Como hemos dicho, se aplica sobre todo en el mundo de las Startups, que necesitan optimizar sus recursos para crecer rápidamente. Sin embargo, esta disciplina es extensible al resto de empresas, pues todas las organizaciones desean lograr el máximo crecimiento con el mínimo gasto posible. Para ello, es necesario aplicar la creatividad, logrando encontrar soluciones innovadoras que ayuden a resolver los problemas de los usuarios.

Cómo aplicar el Growth Hacking

Ahora que ya sabemos qué es Growth Hacking, queremos explicar cómo se puede aplicar a la empresa. Independientemente de si se trata de una empresa nueva o de una ya consolidada, se deben seguir los siguientes pasos:

1. Trabajar en el desarrollo del producto

Para que funcione el Growth Hacking, es necesario trabajar duro en la creación de un producto que merezca la pena, pues no basta únicamente con vender un producto de forma creativa y barata. El fin es ofrecer un producto que la gente desee consumir y compartir con los demás. Si ya tenemos uno, debemos analizar si funciona y, en caso de que no sea así, mejorarlo.

Un producto no tiene por qué ser tangible. De hecho, actualmente encontramos muchos productos que no lo son, como una red social. Si tenemos en cuenta el ejemplo de Facebook, por ejemplo, nos damos cuenta de que es un producto muy rentable. Además, hace que el usuario haga publicidad de la propia red social a través de diferentes técnicas de difusión, como la posibilidad de invitar a otros amigos.

2. Analizar el mercado

Una vez que tengamos listo el producto, debemos analizar los datos recopilados, que deben centrarse en el consumidor. Tenemos que fijarnos en factores como su comportamiento, el customer journey, el proceso de compra, etc.

En esta fase podemos usar el embudo de conversión, que consiste en analizar el proceso que sigue el usuario desde que conoce nuestro producto hasta que se convierte en cliente de la marca. Normalmente, dicho proceso pasa por una serie de etapas: atracción, conversión, recurrencia, facturación y recomendación.

Para que el Growth Hacking sea efectivo, es necesario optimizar, al menos, las etapas más decisivas:

  • Fase de atracción: hay que realizar una estrategia de marketing 360.
  • Fase de conversión: es importante conseguir leads trabajando en la home page y landing page de la web.
  • Fase de recurrencia: una vez que ya tenemos tráfico y una base de datos de clientes, debemos activar al usuario con acciones como email marketing o remarketing.

3. Definir objetivos

El objetivo último es crecer, pero para lograrlo hay que establecer una serie de metas que nos guiarán hacia él. Cuando nos ponemos pequeñas metas que se alcanzan más rápidamente, solemos resolverlas mejor. Por el contrario contrario, un objetivo demasiado general y ambicioso implica mucho tiempo y esfuerzo, por lo que a veces nos impide avanzar.

4. Utilizar la creatividad

La búsqueda de soluciones que se salgan de lo común para resolver los problemas de los usuarios es clave. Una de las opciones es ofrecer a los usuarios la posibilidad de compartir tu producto para que lo difundan. Así, llegará a un mayor número de personas. Sin embargo, se pueden utilizar múltiples técnicas. Lo más importante, como hemos dicho, es aplicar la creatividad y ofrecer algo nuevo.

5. Abrir tu mente

Para que el Growth Hacking funcione, es imprescindible que quienes lo apliquen tengan la mente abierta a nuevos cambios y nuevas formas de trabajar. Sobre todo, es importante que estén dispuestos a poner en práctica todas las oportunidades que ofrece el mundo digital.

Saber qué es Growth Hacking es el primer paso para decidirse a aplicarlo. Entre las ventajas que nos ofrece, destaca la posibilidad de llevar a cabo acciones de gran impacto con un bajo presupuesto. También nos permite reducir el riesgo, ya que las acciones solo se llevan a cabo tras comprobar si son viables. Y, además, ayuda a introducir cambios en tiempo real para mejorar el producto gracias al análisis constante de los resultados de las acciones.

Carmen Pola
Carmen Pola

cpola@taktic.es