¿Qué beneficios aportan las metodologías ágiles?

Paralelamente a la aparición de nuevas tecnologías, lenguajes de programación, etc. también aparecieron nuevas metodologías de trabajo para el desarrollo de software. Frente al método en cascada o waterfall, las llamadas metodologías ágiles son cada vez más habituales en el día a día de los equipos de desarrollo. La gestión de proyectos en cascada se basa en una serie de etapas que se ejecutan de manera secuencial: Requisitos, Diseño, Análisis, Desarrollo, Pruebas y Lanzamiento, y en un presupuesto cerrado, lo que acota y limita el alcance del proyecto. Como veremos a continuación, las metodologías ágiles rompen con estos conceptos. Además, trataremos sobre los beneficios que aportan las metodologías ágiles en la gestión de proyectos y en el desarrollo de software.

Fundamentos y valores de las metodologías ágiles

Antes de abordar los beneficios de las metodologías ágiles, se deben conocer los pilares en los que se fundamenta esta metodología. Estos pilares son un conjunto de cuatro valores y doce principios recogidos en el Manifiesto Ágil. Este documento fue firmado en 2001 por un conjunto de expertos en el desarrollo de software y que planteaba unas bases para una nueva metodología rompedora y en contraposición a las técnicas de aquel momento. Los cuatro valores mencionados son los siguientes:

1. “Individuos e interacciones sobre procesos y herramientas
2. Software funcionando sobre documentación extensiva
3. Colaboración con el cliente sobre negociación contractual
4. Respuesta ante el cambio sobre seguir un plan

Esto es, aunque valoramos los elementos de la derecha, valoramos más los de la izquierda. “

Como bien se apunta en la última frase, aunque se preste más atención a los primeros elementos, los segundos se siguen teniendo en cuenta. Se puede caer en la trampa y abandonarlos, pero estaríamos cometiendo un grave error. En el post Gestión de Proyectos Ágiles (mitos y leyendas de Scrum) hablamos sobre este tema.

Para apoyar estos cuatro pilares, se redactaron doce principios para llevar a cabo las metodologías ágiles, dentro de los cuales destaca el compromiso con la entrega temprana y continua de software funcional, la aceptación de cambios en el alcance y la colaboración estrecha entre los responsables de negocio y el equipo de desarrollo.

A raíz de estas bases fueron apareciendo una serie de metodologías ágiles que aplican de forma distinta estas buenas prácticas, como por ejemplo, Extreme Programming, Kanban o Scrum. Estas tres son las más conocidas y extendidas. Cada una tiene sus características y herramientas pero todas se fundamentan en el mismo Manifiesto Ágil.

Beneficios que aportan el uso de las metodologías ágiles

A continuación vamos a repasar una serie de ventajas que traen consigo la adopción de los métodos agile. Estos beneficios, los vamos a dividir y estudiar desde dos perspectivas. La primera, desde la visión del equipo de desarrollo y la segunda, desde la vista del cliente.

Ventajas para el equipo de desarrollo:

• Facilita la planificación: ya que se dividen los proyectos en sprints, los desarrolladores tienen mucho más claro los requisitos a entregar para cada fecha (finalización del sprint). Para el desarrollador es más sencillo abordar el proyecto en pequeñas fases con una duración y alcance determinados.
• Mejora la comunicación interna: debido a las características propias de las metodologías ágiles, el intercambio de impresiones es más fluido en el equipo de trabajo. Los responsables de las tareas están bien definidos y hay un continuo traspaso de información sobre el estado de los requerimientos.
• Aumento de la implicación y de la motivación del equipo: ya que todos los miembros del equipo están informados en todo momento del estado del proyecto. La involucración y el sentimiento de importancia aumenta mejorando la eficiencia de los trabajadores

Ventajas para el cliente:

• Producto útil desde la primera etapa del proyecto: el cliente no tiene que esperar mucho tiempo para empezar a recuperar la inversión realizada ya que, desde los primeros sprint, el equipo de desarrollo entrega un PMV (Producto Mínimo Viable) que puede ser utilizado con garantías. Para ejemplificar esto imaginemos el desarrollo de un coche
• Entrega continua de producto: tras la finalización de cada sprint, el software se actualiza con las nuevas modificaciones. Además, los requerimientos más valiosos se planifican para los primeros sprints/entregas, para que la entrega de valor de negocio se realice desde el primer momento.
• Mejora la calidad del producto: debido a la planificación de sprint, se realiza un testeo a la finalización de cada fase de desarrollo. Es por tanto, más fácil, detectar y corregir errores. Además, la detección de estos fallos en etapas tempranas del proyecto, supone una garantía para el cumplimiento de plazos y costes del mismo. Con la gestión de proyecto en cascada, una detección tardía de errores puede suponer el fracaso de todo el proyecto.
• Mayor flexibilidad ante nuevas necesidades: una de las señas de identidad de las metodologías ágiles es mantener el alcance abierto y cambiante, es decir, permitir añadir nuevos requerimientos o incluso quitar otros.

Acabamos de las ventajas de adoptar metodologías ágiles para la gestión de proyectos. Si te ha parecido interesante este artículo no dejes de visitar el blog de nuestra web TAKTIC donde seguiremos hablando de metodologías ágiles y donde podrás encontrar otros posts que pueden ser de tu interés.

Además si estás interesado en aprender en profundidad sobre Agile, te animamos a que nos preguntes por nuestro curso de Metodologías Ágiles y por nuestro curso de Scrum.