PIM: ¿qué es y para qué sirve?
PIM (Product Information Management) es un término que seguramente estarás escuchando cada día más, da igual el sector al que te dediques o la actividad que realices, o el producto o servicio que vendas. En todos ellos la implantación de un sistema PIM puede resultar una ventaja competitiva. Pero no todo el mundo tiene claro qué es PIM o cómo puede ayudarte a mejorar tu negocio, por lo que vamos a explicarte en este artículo de que se trata.
La importancia de la información de producto
En los últimos años hemos experimentado un gran auge del comercio electrónico. De acuerdo con los datos presentados por IAB Spain y Elogia en el Estudio eCommerce IAB 2016, el 74 % de los usuarios españoles de Internet compraron online en algún momento del año. Y, aunque actualmente la mayor parte de estas compras se hacen desde un ordenador, las aplicaciones móviles están ganando terreno, llegando ya a un 15 % de las ventas online.
Estos clientes online demandan información sobre los productos desde cualquier dispositivo y desde cualquier lugar del mundo. Por ese motivo, resulta imprescindible adaptarlos a cada mercado, estar disponibles 24/7 y preparados para distribuirlos en un entorno omni-channel.
Hacer esto correctamente es lo que va a aportar valor a nuestra marca y, para conseguirlo, es necesario adoptar una estrategia a largo plazo.
La mayoría de las empresas tienen dispersos los datos de los productos en multitud de sitios y departamentos: datos comerciales y de fabricación en el ERP, hojas Excel con datos técnicos, fotografías en alta resolución en carpetas compartidas, descripciones comerciales del producto en documentos de Word, posts en blogs corporativos, fichas web con datos adicionales, etc.
Esto genera una gran carga en el tratamiento, recopilación y alineación de información de producto. Como ejemplo a la hora de realizar un nuevo catálogo, es necesario recopilar datos de producto procedentes del ERP, a los que habrá que añadir descripciones del departamento de marketing, información obtenida de los proveedores, crear contenido multimedia o adaptar el ya existente, que puede tener diferentes formatos y resoluciones. Este proceso puede llevar hasta 2 meses a un equipo de 4 personas.
Si, además, queremos publicar este contenido en otro canal (redes sociales, blog, YouTube,…), gran parte de este proceso se va a repetir, duplicando por tanto tiempos y esfuerzos.
PIM: ¿qué es y para qué sirve?
Un sistema PIM es un repositorio centralizado y actualizado de toda la información de nuestros productos. De esta manera, podremos eliminar las inconsistencias creadas por la existencia de información dispersa almacenada de diferentes formas en distintos lugares. Asimismo, daremos una visión de marca consistente al tiempo que nos adaptamos a las peculiaridades de cada canal. Pero eso no es todo. El PIM también permite crear, compartir y distribuir nuevo contenido de forma sencilla y rápida a cualquier canal, a la vez que nos simplifica las integraciones que podamos realizar con otras aplicaciones.
Con la implantación de un PIM vamos a conseguir una salida al mercado más rápida, pues se reducen los tiempos en crear, adaptar y traducir la información de cada producto, a la vez que incrementa la productividad y se reducen los costes asociados a ello. Esto nos permite dedicar más tiempo y esfuerzo a lo que verdaderamente aprecia el cliente: contenidos de mayor calidad, que generan valor para el producto.
Beneficios del PIM
Ahora ya sabemos qué es PIM, pero ¿cuáles son sus beneficios?
- Acceso centralizado a los datos. Hay un repositorio central en el que se encuentra toda la información del producto.
- Colaboración. Es accesible a toda la empresa y facilita la generación de workflows de creación y aprobación para completar las tareas rápida y eficientemente.
- Gestión de contenidos digitales. Permite incorporar contenido no estructurado desde diferentes fuentes como fotos, vídeos, documentos anexos…
- Distribución multichannel. Facilita la reutilización de información y publicación en diferentes plataformas, de forma que el contenido siempre esté actualizado en todos los canales.
- Globalización. Facilita la traducción y la gestión de contenidos en diferentes idiomas.
- Experiencia de usuario. Mejora la experiencia del usuario final.
- Reducción de costes. Al reducir el tiempo empleado en crear y adaptar contenido, se aumenta la productividad y se reduce el tiempo de salida al mercado.
- Cumplimiento de la normativa. Ayuda a cumplir la normativa, ajustándose a la legislación local del país de destino.
En un momento en el que el mundo de la distribución es cada vez más complejo, pues cada compañía tiene que gestionar diferentes marcas para diferentes países, con múltiples precios y múltiples promociones, es necesaria una nueva arquitectura de información, que realice la conexión entre la empresa, los usuarios finales, partners…
Una manera de mitigar esto es realizar un despliegue en cloud, que nos va a permitir reducir costes al tiempo que nos proporcionará escalabilidad para seguir creciendo en un futuro. Casi todas los proveedores actuales de sistemas PIM disponen de soluciones en cloud, tanto los propietarios (Oracle, IBM…) como las alternativas de software libre (Akeneo, Pimcore…)
Aunque la implantación de un PIM es un proceso largo, no existe alternativa para las empresas. Como marca somos responsables tanto del producto físico como del contenido que generamos sobre él. Los clientes y partners demandan cada día más y mejor información, a la hora de comprar online buscan y comparan multitud de detalles. Ya no se conforman con una pequeña foto y un texto descriptivo, quieren alta definición, varias perspectivas, vídeos, modelos 3d… Pero no todo son especificaciones y características; aunque estos son importantes, la información de producto debe ser completa y atractiva, debe contar una historia. Esto es lo que va a crear una experiencia diferenciadora a los clientes, estableciendo una relación de confianza con la marca y sus productos.
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